Cuando la pérdida auditiva va progresando y los audífonos parecen no ser suficientes, quizá sea tiempo de buscar otras soluciones. Algunas pruebas caseras pueden ayudar a detectar esta situación para, por supuesto, acudir al especialista.
Perder la audición es un proceso natural, que se da de manera paulatina a medida que pasan los años. Sin embargo, hay casos en los que esa deficiencia es más marcada y requiere consulta médica temprana.
Al mismo tiempo, el aumento de la expectativa de vida hace que estemos activos laboral y socialmente muchos más años que nuestros antepasados. Por eso, cada vez se vuelve más imprescindible estar atentos a nuestros oídos, su salud y su estado óptimo. Especialmente si tenemos en cuenta los últimos estudios que sugieren que existe una conexión importante entre la hipoacusia y la soledad, la depresión y la demencia.
Para quienes sufren pérdida auditiva y sientan que los audífonos ya no alcanzan, también hay solución. Lo importante es actuar a tiempo, consultar con el profesional y seguir sus indicaciones.
Mientras tanto, algunas pruebas caseras pueden ayudar a detectar si, efectivamente, es necesario pasar al nivel siguiente porque los audífonos no son suficientes. Con los audífonos:
- ¿Tiene dificultad para escuchar conversaciones, especialmente con ruido de fondo?
- ¿Le pide a las personas que repitan lo que dijeron?
- ¿Entiende mal lo que dicen?
- ¿Tiene problemas para oír por teléfono?
- ¿Sube más el volumen del televisor de lo que prefieren otras personas en su casa?
- ¿Le parece que las personas a menudo balbucean cuando hablan?
- ¿Tiene problemas para escuchar los sonidos de la naturaleza como el canto de los pájaros o la lluvia?
- ¿Se encuentra diciendo que sí, sonriendo o asintiendo con la cabeza en las conversaciones cuando no está seguro de lo que se ha dicho?
- ¿Se retira de las conversaciones porque es demasiado difícil oír?
- ¿Lee los labios para entender lo que dicen las personas?
Si respondió “sí” a alguna de estas preguntas, es posible que un dispositivo auditivo, como un implante coclear o un implante de conducción ósea, sea la respuesta para usted.